Hoy, 22 de enero, día de San Vicente Mártir, patrón de la capital del Turia, festivo en la ciudad de Valencia de cruces para dentro, hace 45 años que mis padres, contrajeron matrimonio.
Y mucho ha llovido desde entonces. Toda una vida juntos. Han disfrutado de lo que se suele decir, de un amor para toda la vida.
Pero también han sufrido y se han enfrentado a verdaderos Miuras. Y han recibido cornadas.
Pero ambos han demostrado que son auténticos toreros, reponiéndose de las heridas. Luchando contra las adversidades. Estando uno al lado del otro.
Y aunque a veces su cuadrilla no ha sabido hacerle un buen quite, siempre han estado allí.
Y por eso desde aquí, quiero felicitarles en este día tan especial y darles gracias por el mejor regalo que he recibido jamás. Mi vida.
Gracias.
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