Hoy es uno de esos días en que mi mente anda un poco loca. Uno de esos días en que piensas en aquello que pudo ser y no fue. Uno de esos días en que me hubiera gustado no levantarme de la cama.
Pero ellos no merecen que yo esté mal. Por eso, el escrito de hoy va por ellos. Va por todos aquellos que un día soñaron con el toro. Aquellos que con su mayor ilusión entrenaron en aquella Escuela. Aquellos que un día hicieron las maletas rumbo a lo desconocido. Aquellos que soñaron que un día se cumpliría su sueño.
Pero no se cumplió. Ellos lo dieron todo. Hipotecaron su juventud. Vivieron otra vida, diferente a la de otros jóvenes. Ellos se vistieron aquel vestido de torear, aquel traje de luces de segunda mano quizá. Rezaron en la capilla e hicieron el paseillo, como los demás.
Pero no triunfaron. Nadie se acordó de ellos en toda la temporada. Estuvieron esperando aquella llamada que nunca se produjo. Pero siguieron entrenando, siguieron soñando.
Y puede ser que algún día vean realizado su sueño. ¿Quién sabe? ¿O no? Pero ellos siguen luchando. Recordando aquellos momentos previos, aquellas mañanas de tensión, aquellas noches eternas.
A veces, los sueños imposibles, se cumplen. Solo a veces.
Es de las cosas mas lindas que he leído en mucho tiempo.
ResponderEliminarNo quiero que tengas días de esos en los que no quieres levantarte de la cama, pero si llega alguno, no dejes de escribir y de crear textos tan bellos como este.
GRACIAS.
Alhamar
Pues últimamente tengo muchos días así. Pero es verdad, esos días, son los que me salen las cosas del alma. Así que al menos, saco algo positivo.
ResponderEliminar¡Cuánto tiempo! Me alegra "verte" de nuevo.
Un beso