lunes, 21 de marzo de 2011

Adiós con el corazón

... Que con el alma no puedo. Así, con esta canción, doy por finalizada esta Feria de Fallas 2011.

Una Feria, que a pesar de todo, ha sido buena para mi.

A pesar de la lluvia, del frío, del viento y del calor. Porque tuvimos de todo.

A pesar de que todos los días lucieran todas las banderas, fuera corrida de toros, novillada o novillada sin picadores.

A pesar de que disfruté de pocos quites, poco aprovechados por los matadores, que no por los novilleros.

A pesar de las decepciones, del ganado y de algunos toreros de los que esperaba mas.

A pesar de que la Banda de música desafinara mas de la cuenta, pero dentro de lo que cabe, se portó y no sonó siempre, a pesar de los gritos de parte del público.

A pesar de la megafonía, que se oía poco o que incluso no funcionó, cuando el orden de los actuantes, no coincidía con el cartel, por ejemplo el día de la última novillada.

Y me quedo con el detalle del sobrero de Vicente Barrera, digan lo que digan por ahí, con los pares de banderillas de El Levantino y con la brega de César Fernández.

Me quedo con la faena de El Juli, aunque no me emocionó. Con la recuperación de El Cid, que fue una agradable sorpresa. Con el valor de Miguel Angel Perera, que me encantó.

Con los detalles de Leandro, de Curro Díaz, de López Simón y de Jonathan Varea. Con el faenón de Jose María Manzanares, a pesar de la espada. Con el esfuerzo de Sebastián Castella, tras su lesión. Y sobre todo, con las agallas de Alberto Aguilar.

Me quedo con el encierro de Fuente Ymbro, aunque quedó deslucido por los toreros actuantes. Me quedó con el excelente juego de los novillos de Parralejo en la de sin picadores. Y me quedo con el espectáculo de los toros del Niño de la Capea.

Y me quedo con la comodidad del tendido. Y aunque el precio haya subido, ha valido la pena.

Quiero olvidar las faenas de Enrique Ponce, quien lleva unos años poco afortunado en su plaza y a merced de las ganaderías que supuestamente" escoge. Olvidaré la actuación de Cayetano, quien quiso homenajear a su padre, pero desgraciadamente para mi, me decepcionó. Y olvidaré el toreo de aquellos que estuvieron, pero que no debían haber estado.

Lamento que de nuevo, Morante de la Puebla no demostrara en mi plaza eso que cuentan que sabe hacer con el capote y que yo todavía no he podido presenciar en una Plaza de Toros.

Y eché de menos a José Calvo en el ruedo, que debía haber estado toreando y regalándonos su Arte, aunque no en el tendido, donde permaneció todas las tardes.

Escuché la floreada, tan típica de Valencia, aunque poco merecida. Vi saltar la barrera a dos Adolfos y me acordé de mi abuela, a la que tanto le gustaba.

Y aunque el día 18 parecía que todos los astros se habían aliado en mi contra, fue el mejor día. Y aunque maldormí en un sillón en una habitación de un hospital y mientras la mayoría andaba disfrutando de la Nit del Foc, yo me dí cuenta de que vale la pena seguir soñando.

Porque la Feria no solo es ver lo que ocurre en el ruedo, sino el café que compartes con amigos, las tertulias con aficionados, las sonrisas que te regalan los toreros. Y si encima, te emocionas, es lo mas.

Por eso, el balance que hago de la Feria, es positivo. Y me dió pena que terminara. Pero mantengo la ilusión, de que todavía vale la pena seguir siendo aficionada.

2 comentarios:

  1. gracias amparo por tu compañia tu amistad y el regalo que por cierto ya tengo firmado, es mi segunda feria de fallas y ha sido mejor que la anterior,en parte a ti y las personas que me presentaste,en la parte taurina me quedo con la serie de naturales lentos y bajando la mano del cid a su segundo toro de capea, que mejor sitio para volver que valencia en fallas, esperemos que no haya sido un espejismo del torero de salteras.
    gracias amparo y na pronta recuperacion para tu madre.

    pablo del castillo alonso
    "pablo cillo" en facebook

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  2. Fue un placer, Pablo. Siempre es agradable conocer gente buena. Te espero a la próxima.
    Mi madre, ahí sigue. Me temo que nos quedan unos cuantos días de hospital. Pero ahí estaremos.

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